Los tres ejercicios esenciales de una experta en neurofitness: "Sirven para mantener el cerebro en forma"

Con el paso de los años se va haciendo más evidente el deterioro cognitivo. Por eso mismo es importante entrenar el cerebro para mantenerlo sano e intentar que no decaiga en sus funciones. Según Catalina Hoffmann, experta en neurofitness, entrenar el cerebro es importante básicamente porque se trata de “una cuestión de salud”. Sin embargo, la salud de nuestro cerebro parece que no importan hasta que aparece alguna enfermedad relacionada. La experta en entrenamiento cerebral da tres ejercicios básicos para mantener el cerebro en forma.

¿Por qué es importante entrenar el cerebro?

La salud del cerebro importa siempre, por eso mismo, Hoffmann considera que “practicar neurofitness nos ayuda a ser conscientes, día a día, de la necesidad de cuidar nuestra salud cerebral, además de experimentar por nosotros mismos los beneficios de hacerlo, que son espectaculares”.

Sin embargo, pese a la idea prestablecida de que hay que cuidar la mente a partir de la mediana edad, señala que “entrenar el cerebro es importante a cualquier edad. Da igual si tienes 10, 30, 50 u 80 años, el entrenamiento cerebral siempre es posible e importante”, remarca.

Tres ejercicios para mejorar nuestra mente

¿Qué ejercicio es mejor? Depende, “no existe una fórmula mágica porque cada persona es distinta y tiene unas necesidades diferentes”, indica la experta en neurofitness. Pese a ello, ofrecer tres consejos que, bajo su criterio, son importantes para el cuidado y el entrenamiento de la mente:

  • La poda neuronal artificial, que nos permite liberarnos de pensamientos y asociaciones negativas. Esto es algo que hacemos de forma natural de niños, pero que se puede aprender a hacer en la edad adulta. 
  • El silencio neuronal, que consiste en llevar a nuestro cerebro a un estado de calma. A esto ayuda mucho la música que compongo, que está pensada específicamente para esto. 
  • La técnica de la transmutación de pensamientos, que nos ayuda a identificar ideas y emociones negativas y gestionarlas de forma positiva. Esto es muy importante porque la mayoría de los pensamientos que tenemos son negativos y, muchas veces, irreales. ¿Cuántas veces nos hemos agobiado por algo que nunca ha pasado? Esta técnica nos permite tomar el control sobre esos pensamientos, en lugar de que sean ellos los que nos dominen a nosotros.