Niksen, el arte de no hacer nada: la técnica holandesa que te obliga a parar para ser más productivo

  • Niksen es, para los holandeses, el arte de no hacer nada, y a ellos les funciona a las mil maravillas

  • Esta técnica te permite pausar tus tareas y no hacer nada para mejorar tu productividad y tu creatividad

  • No todo lo que creemos que es Niksen es no hacer nada, por eso hay que tenerlo claro para liberar el estrés

Cuando estamos en el sofá, tirados, viendo la televisión o simplemente no haciendo nada muchas veces nos sentimos culpables, improductivos, sabiendo que podríamos aprovechar ese tiempo para hacer cualquier cosa importante. Pero no hacer nada muchas veces puede ayudarnos, ahí está el arte del Niksen, la técnica holandesa que precisamente consiste en eso, en no hacer nada. Pero lejos de ser sinónimo de vago, en el país defienden este método como algo primordial para la salud, el estado de ánimo o su creatividad, para saber cuándo parar y tomarse una pausa.

Permitirte una pausa

La creencia de tener que ser productivos siempre, las 24 horas del día, puede provocarnos estrés y, por tanto, seamos mucho menos productivos en nuestro día a día. Un artículo sobre el Niksen en The New York Times trataba como realmente llegar a ese punto de no hacer nada es muy complicado, pues vivimos en una sociedad conectada, en la que siempre tenemos el móvil encima, por lo que desconectar es una tarea casi imposible.

En ese mismo texto hablaron con una psicóloga, Sandi Mann, que había estudiado este fenómeno, llegando a la conclusión de que ese proceso de inactividad puede hacer a las personas mucho más creativas y resolutivas frente a los problemas que se les presentan en su vida cotidiana. Además, ese momento en blanco, sin hacer nada, puede ser el instante de recargar pilas, pues de nada sirve mantenernos activos y supuestamente productivos cuando realmente no podemos serlo porque estamos agotados.

El manifiesto del Niksen

Annette Lavrijsen es la autora de Niksen, un libro sobre esta técnica en donde ha creado un manifiesto, cinco puntos por los que defender esta práctica como beneficiosa para la salud de quienes la practican:

  • Voy a hacer del no hacer nada una prioridad, porque eso puede hacerme más productivo, creativo y feliz.
  • Permitirte no hacer nada, ignorar a cualquier persona que te diga que eso es sinónimo de pereza o inutilidad.
  • Sacar tiempo de tu día a día para no hacer nada, limitando el tiempo y controlando tu agenda.
  • Haz de esos momentos parte de tu vida en todas sus vertientes, tanto en la privada como en la profesional.
  • Conviértelo en un hábito de vida para que tu mente pueda liberarse en esas actividades que no tienen ningún objetivo.

¿Qué es y qué no el Niksen?

Pero, ¿cómo conseguimos no hacer nada? ¿Qué se considera Niksen y qué no? Por ejemplo, acostarnos a mirar nuestras redes sociales o pasarnos la tarde viendo capítulos y más capítulos de nuestra serie favorita podría considerarse no hacer nada, pero realmente no pertenece al Niksen, es más, es algo así como lo contrario, pues nos puede llevar a aumentar los niveles de estrés e incluso asociarse a las adicciones.

Entonces, ¿qué es el Niksen? Uno de los ejemplos más sencillos es retirarse a un lugar apartado y tranquilo, desde ese rincón de tu jardín, al césped de un parque, un banco con vistas espectaculares, una playa, o esa ventana de casa que siempre te transmite paz. En ese momento solo te queda no hacer nada, aunque puedes añadir música y dejar que tu mente se despeje por completo.

Lavrijsen aconseja hacerlo, si no cada día, sí con una rutina, sin esperar a tener días libres para que no nos ocupe mucho tiempo. No hacer nada durante un rato con frecuencia puede hacer que esos ratos sean breves. En su opinión, pueden ser descansos de unos cinco minutos al principio para ir aumentado el tiempo hasta poder alcanzar media hora o una tarde entera cuando la tienes libre y así dedicar ese tiempo a uno mismo según lo necesites. Cada persona considera el tiempo que necesita para estar inactivo.

Los posibles beneficios del Niksen

En su libro, la autora establece los beneficios sobre la productividad, la creatividad o la felicidad que el arte de no hacer nada tiene para las personas:

  • Mayor energía: te permite recargar cuerpo y mente.
  • Más salud: reduce el agotamiento y mejora la concentración.
  • Felicidad familiar: te permite tener más atención en el núcleo familiar reduciendo tu estrés.
  • Un cerebro más liberado: si estamos ocupados no paramos, permitirnos una pausa nos ayuda a mejorar la memoria, la atención o la capacidad de reflexión.
  • Más eficientes: si podemos concentrarnos mejor, seremos más eficientes en nuestras tareas diarias.
  • Mejor autoconciencia: seremos conscientes del tiempo que malgastamos para invertirlo mejor.
  • Plantear objetivos: si nuestra mente divaga y está más liberada pensará mucho mejor y más centrada sobre el futuro.
  • Mejora el sueño: los descansos permiten reducir los niveles de estrés y, a su vez, mejora la calidad del sueño.