Bastones: materiales, cuál es el más adecuado según tu edad y tu dolencia

  • Puedes pensar que elegir bastón es fácil, pero nada más lejos de la realidad. Descubre qué tipos hay y cuál se adapta mejor a determinadas necesidades

A determinada edad, por mucho que pese, hay quienes tienen que ayudarse de un bastón para caminar. Aunque no quieras, el bastón, además de darle un toque interesante a tu estilo, facilita el movimiento y la rutina. Las pérdidas de equilibrio o el cansancio al caminar son solo algunas de las molestias o sensaciones que se pueden prevenir o mejorar cuando se utiliza un bastón como elemento de apoyo. No los subestimes, porque pueden ser de mucha utilidad en tu día a día. Así que si estás pensando que quizá no te vendría mal uno, solo queda saber cuál es el mejor para ti.

Pero para saber cuál puede ser el bastón que mejor te venga, debes tener en cuenta algunos factores. El primero es la altura, pues dependiendo de lo que midas, tendrás que elegir uno u otro para que así se adapte de la mejor forma a tus necesidades. El segundo es el mango para agarrarlo. Ten en cuenta el uso que le vas a dar, por lo que es necesario que te encuentres a gusto y cómodo para tener el mejor manejo del bastón posible.

El bastón estándar, un valor seguro

Seguramente que al pensar en uno se te venga a la mente el más típico, el que tiene la empuñadura en forma de T o de gancho. Aunque sea el estándar, es muy fácil de manejar, es ligero y su uso permite disminuir el cansancio mientras se camina, uno de sus principales objetivos.

El bastón plegable es muy similar al anterior y suele usarse para personas ciegas. Pero lo bueno de este tipo de bastón es que al poderse plegar, se puede guardar en cualquier sitio. Por eso es muy común que las personas que necesitan bastón los utilicen cuando salen de viaje, pues pueden meterlo sin ningún problema en su maleta o bolso sin molestar a nadie y sacarlo cuando sea necesario.

Otra variante del bastón normal es el que viene con su propio asiento. Sí, has leído bien, un bastón con un taburete plegable. Este tipo de bastón lo suelen utilizar personas con problemas de movilidad que no puedan mantenerse de pie durante largos periodos de tiempo. Por eso, este bastón suele ser mucho más resistente que los anteriores, tiene que poder mantener la estabilidad que necesita para cumplir su función.

Otros tipos de bastón

Existe otro tipo de bastón que está especialmente recomendado para las personas que tienen poco equilibrio o que no aguantan por completo el peso de su cuerpo. Este es el bastón de cuatro patas, que gracias a ellas se agarra mucho mejor a la superficie, por lo que es más estable que cualquiera de los anteriores.

Por su parte, están los bastones que están hechos con una empuñadura ergonómica. Gracias a ella, se agarra con mucha más firmeza y seguridad porque evita el deslizamiento de la mano, por ejemplo, por el sudor.

Y por supuesto, la mítica muleta. Se suele usar cuando se sufren molestias en alguna de las piernas y se ayuda de ellas para poder caminar de forma segura. De ahí que tengan un soporte para que la persona pueda apoyar los brazos cuando se utilizan.

El andador, cuando se necesita más apoyo

Puede que necesites mucho más apoyo del que te presta un bastón, dado que con el no es suficiente. En estos caso se requiere de un andador, que te da más estabilidad y autonomía. Existen dos tipos generales de andadores. Los simples tienen sus cuatro patas que dotan de una gran estabilidad a la persona que lo maneja. Luego también están los de ruedas, que pueden tener 2 o 4.

Los que tienen 2 ruedas se encuentran en la parte delantera, mientras que en la trasera tienen dos apoyos fijos, como el de los simples. Son fáciles de utilizar y su uso está principalmente destinado al interior del hogar. Por su lado, los de 4 ruedas necesitan un poco de habilidad por parte del usuario, pero una vez cogido el truco permite tener una gran movilidad. Además, cuentan con frenos en sus ruedas posteriores para mantener la seguridad.

Lo bueno de los andadores frente a los bastones, además de una mayor estabilidad, es que se le pueden añadir accesorios, como por ejemplo un asiento para descansar o una cesta en la que se puedan llevar las cosas de cada uno.

No hay que renegar de los bastones, si se necesita utilizarlos será para tu propio beneficio. Ahora que conocer qué tipos de bastones existen, no será tan difícil elegir cuál es el que mejor viene a tus necesidades o a las de alguno de tus familiares.