Javier Ruiz sobre el acoso que sufre por parte de los fans de los youtubers de Andorra: "Libertad de expresión no es de agresión"

  • Cada viernes en 'Moneytalks', en directo en Instagram, Javier Ruiz nos explica de manera sencilla los grandes titulares de la prensa económica

  • En esta ocasión, nos lo ha explicado todo sobre la Ley de Riders, y ha dedicado un tiempo para hablar sobre el odio en redes sociales, que ha sufrido en primera persona

En el 'Moneytalks' de esta semana, Javier Ruiz ha charlado en directo con nosotros en nuestra cuenta de Instagram para explicárnoslo todo sobre un asunto que está de plena actualidad: la regulación del trabajo de los riders. Las conversaciones se están produciendo ahora mismo y es un tema lleno de aristas y complejidades, por ello, nuestro experto ha pasado por su sección de 'Uppersgram' para bajarnos a tierra todos los aspectos de este asunto de economía digital.

"Afecta a los trabajadores que reparten comida, que son autónomos, considerados hasta ahora como emprendedores. Son ellos quienes corren con sus gastos y, por lo tanto, cobran menos", ha comenzado explicando. En los últimos 3 meses han tenido lugar 8 reuniones sobre el tema y, aunque todavía no hay acuerdo, el Gobierno va a legislar igualmente: "El Gobierno obliga a esas empresas a contratar a estos chicos".

"El 89% de los trabajadores de estas plataformas son hombres. Y el 65% son de Latinoamérica. Así, estamos regulando lo más precario del mercado laboral. ¿Un chico con una bicicleta esclavizado por un horario es un emprendedor? No lo parece. El cambio es que las empresas van a tener que pagarles la Seguridad Social", ha puntualizado.

¿Cómo funcionan estas plataformas y por qué es necesario legislar sobre ellas para regular el trabajo que estos trabajadores llevan a cabo? "Tú te das de alta con el empleador de turno y tienes, teóricamente, capacidad de rechazar pedidos y flexibilidad de horario. Pero, ¿qué ocurre? Ocurre que, con todo esto, ellos corren con los gastos de su bici, su metro, con el de la gasolina si van en moto... es un gasto a plomo del trabajador. En la práctica, hay un algoritmo que te puede desconectar de la aplicación si rechazas pedidos. Y esto es lo que marca que se esté diciendo que estos señores, que dependen de una empresa, no son autónomos: son empleados que tienen que ser tratados como tal. Tienen que cobrar un salario y tienen que ser dados de alta en la Seguridad Social", ha aclarado el experto. "El salario de estos trabajadores es 332 euros de media a la semana. Que si descuentas cuota de autónomos, tu Seguridad Social, el gasto de tus medios... si empiezas a restar, chavales que están, literalmente, pedaleando todo el día, no llegan a mileuristas. Este es ahora mismo el panorama", ha precisado. "Además, la licencia se realquila. Con lo que se realiza una subcontratación de la precariedad. Exactamente eso."

¿Y cuáles son los cambios que se van a introducir? "Primero, se van a tener que dar de alta en las empresas. Y el primer cambio es que las empresas van a tener que correr con los gastos de Seguridad Social. Según estimación del Ministerio de Trabajo, son 187 millones de euros. Las empresas dicen que, si tienen que asumir ese gasto, van a quebrar. Y Trabajo dice que, si no pueden cumplir con los mínimos de salario, no es una empresa, es explotación".

Algunos riders, sin embargo, prefieren seguir siendo autónomos. "Muchos de ellos son trabajadores sin papeles y si hay que regularizarlos, van a perder ese empleo. Ellos dicen que se van a quedar sin lo mínimo, cobrando algo de un mercado más o menos en B. Y esto es un problema real, un argumento válido. Creo que aquí lo que tiene que entrar es otro tipo de cobertura, una legislación complementaria", ha opinado el periodista.

El riderismo ya está pasando en otros trabajos: "entre los corredores de seguros y otras industrias hay una población brutal de falsos autónomos". Pero esta ley es sólo para los riders, hay otros sectores que no van a estar cubiertos: "Creo que esta ley se va a quedar corta", ha apostillado Javier.

El odio en redes sociales

Como cada semana, Javier ha aprovechado esta plataforma para lanzar un mensaje sobre la necesidad que existe de respeto y educación, incluso con las voces discrepantes con tus ideas y especialmente en redes sociales. Javier ha sufrido esta carencia, sobre todo durante estas dos últimas semanas. El viernes pasado no asistió a su cita semanal con nosotros porque "existía una campaña brutal en redes sociales de amenazas e insultos, que son absolutamente intolerables".

Nuestro experto ha narrado todo lo que le ha llevado a estar en el punto de mira del odio de unos cuantos en redes sociales: su crítica a los youtubers que se marchan a Andorra para no pagar impuestos en nuestro país, y su opinión sobre su insolidaridad. "Yo hablo desde el respeto y respeto la discrepancia. No le exijo a nadie que comulgue con mis ideas. Hay gente que sí lo está haciendo. Si no nos decimos barbaridades en la calle, ¿por qué nos las decimos en las redes?". Y lo ha resumido todo con una certera y lacónica frase: "Libertad de expresión no es libertad de agresión".

También hemos aprovechado para alabar el buen clima que hay siempre en la comunidad que se ha creado alrededor de sus directos, que cada viernes a las 11:00, llena nuestra cuenta de Instagram de debates sanos, buenas palabras y reflexiones educadas y maduras. Y que desde Uppers agradecemos profundamente.