¿Qué tipo de barba te favorece más, según tus facciones?

Los hombres están prestando mucha atención a su barba imponiendo determinados cortes muy cuidados. Hace una década se llevaban las barbas tamaño XL o hípster, sin embargo, han ido quedando más anticuadas en favor de otras de menor tamaño, pero muy bien delimitadas. Hemos consultado a nuestro barbero de confianza cómo saber qué tipo de barba te favorece teniendo en cuenta las facciones del rostro y las tendencias actuales. Según destaca el experto hay varias premisas.

En primer lugar, ya no importa el tamaño o la longitud de la barba sino “experimentar estilos diferentes”. En segundo lugar, los barberos se están especializando en el perfilado porque se quiere dar importancia a la forma, con nuevos degradados, e incluso “florituras”. En tercer lugar, está llegando incluso el color; ya hay muchos hombres que se han atrevido a teñirse la barba como nunca antes había sucedido.

No obstante, nuestro barbero explica que “una cosa es lo que se lleva y otra muy distinta encajar el tipo de barba con la forma y los ángulos del rostro”. La clave está en encontrar el equilibrio entre ambos factores teniendo presente además que la abundancia de pelo masculino en la cara y en la cabeza “ofrece la gran ventaja de poder alterar completamente la apariencia”. Así, lo adecuado es ponerse en manos de un experto que recomiende una barba poblada, una perilla, patillas prominentes o si así cree oportuno apostar por un buen afeitado para centrase en definir el corte de pelo de la cabeza.

Otros dos aspectos que considerar antes de decidirse por el tipo de barba son el tiempo disponible para las rutinas de aseo y la velocidad personal de crecimiento del vello; porque determinados cortes obligan a visitar semanalmente al barbero para mantenerlos definidos. Si no hay tiempo para cuidarse la barba mejor prescindir de ella.

Además, es imprescindible mirarse en el espejo para que cada uno descubra la forma de su cara: redonda, cuadrada, rectangular o alargada, ovalada, triangular y hasta en forma de corazón. Es más, incluso con un corte adecuado de la barba cabe la posibilidad de disimular aquellos rostros que tienen más papada.

La barba para un rostro redondeado

Lo ideal ante una cara redonda es querer afinarla y jugar con la longitud de la barba que se presenta como una opción perfecta para compensar un exceso en facciones redondeadas. También se debe reducir un poco la barba de las mejillas y darle así al rostro más ángulo hacia la mandíbula. En estos casos, para nuestro barbero son apuestas seguras la barba Stiletto o la Van Dyke. En la primera se trata de dejar que la barba se llene y esté bien poblada para darle una forma puntiaguda, un efecto que alarga el rostro. La Van Dyke, por su parte, combina una elegante perilla puntiaguda con un bigote natural que se inclina solo ligeramente debajo de los labios. El nombre procede del primer artista conocido que llevaba así cortada la barba, el pintor flamenco Anthony Van Dyck del siglo XVII, al que se supone que imitaron reyes y nobles desde entonces.

La barba para un rostro ovalado

Según el barbero, a una cara ovalada le va cualquier tipo de corte en la barba y en el bigote que busquen un efecto geométrico. Por ejemplo, una opción sería la barba completa con patillas prominentes y bigote donde se afeitan las mejillas y el cuello. Su único consejo es rechazar la Stiletto que por su definición puntiaguda rompe el equilibro de las facciones ovaladas.

La barba para un rostro cuadrado

Las facciones cuadradas ya tienen suficiente fuerza, suele haber más frente y un mentón menos pronunciado, de modo que la recomendación del experto es apostar por una perilla bien esculpida. Si se pretende una mayor distinción resulta también perfecta una barba de correa de barbilla o una sola línea de barbilla. No obstante, a las facciones cuadradas les queda muy bien igualmente una barba completa con un corte Stiletto, otro más desaliñado o la barba de tres días.

La barba para un rostro rectangular o alargado

Con una cara de forma rectangular el barbero destaca que se deben evitar las barbas largas que terminen en punta como es el caso de la Stiletto. En cambio, encaja una barba poblada, con las patillas anchas y cortita por la parte de la barbilla. También quedan bien los cortes Van Dyke, el Balbo o el Goatee (perilla) que atraen la vista hacia arriba y no hacia la parte inferior tal como sucede en los acabados puntiagudos. El corte Balbo es sofisticado y elegante, con un bigote de manillar que no llega a tocar la barba, una correa de barbilla y un parche para conectar esa barba al labio inferior. Por su parte, esta correa de barbilla proporciona una franja de barba a lo largo de la línea de la mandíbula.

La barba para un rostro triangular

En unas facciones triangulares, la mandíbula es más ancha que la frente, de modo que lo ideal es dar un peso menor a la mandíbula y no llamar la atención sobre ella. Los estilos que mejor sientan son los recortados con un bigote algo largo que añada carácter.

La barba para un rostro en forma de corazón

En este caso sucede al contrario que en los rostros triangulares, ya que la frente es más ancha que la mandíbula. Ante unas facciones en forma de corazón tiene que adquirir mayor protagonismo precisamente la mandíbula con una barba corta, una barba completa o el corte Balbo aunque la desaliñada también resulta adecuada.

La barba para un rostro con papada

El barbero explica que incluso se puede disimular la papada con el corte oportuno. Consiste en dejar que crezca el pelo en cantidad hasta que la barba esté muy poblada y que no quede ningún recoveco que deje a la vista la parte inferior del rostro.