Antonio Banderas y la lección vital que aprendió de una enfermera mayor para afrontar esta crisis

  • El actor malagueño de 59 años ha pasado el confinamiento solo en su chalet de Marbella. Todavía en su tierra, reflexiona sobre la importancia de estar con los nuestros y en casa en momentos difíciles

  • Presta su imagen y su testimonio personal en un emotivo anuncio de la Junta de Andalucía tras la crisis por coronavirus: "Siento que todos estamos saliendo de un ataque al corazón"

El nombre de Antonio Banderas resuena estos días más allá de su tierra. El malagueño de 59 años, que ha pasado el confinamiento en su chalet marbellí donde el estado de alarma le sorprendió trabajando, se convertía en trending topic en Twitter durante unas horas tras publicarse el spot publicitario de la Junta de Andalucía para el que ha prestado su imagen y su testimonio más personal. El actor cuenta la historia de cómo se recuperó tras padecer un infarto en enero de 2017, lo aprendido, y cómo aplicarlo en momentos complicados como los que atravesamos.

Abanderado de su tierra, el gesto no sorprende por parte del artista y empresario. El Teatro Soho Caixa Bank, la recién estrenada productora Soho TV con María Garrido a la cabeza o su participación activa en diversos negocios de restauración de la ciudad, como el mítico El Pimpi, son algunos de los lazos profesionales que en esta etapa vital lo unen más si cabe a sus orgullosas raíces.

En el anuncio, además de compartir generosamente su vulnerabilidad, reflexiona sobre el momento actual acercando esa lección aprendida de manos de la enfermera que le atendió en su momento de salud más crítico a la situación de crisis sanitaria por coronavirus.

"Estando ingresado, una enfermera ya mayor me hizo una de las preguntas más raras que me han hecho en mi vida. '¿Usted cree en la cultura popular?' ¿Por qué cree que la gente dice 'te quiero con todo mi corazón' y no' te amo con todos mis riñones o todo mi cerebro?'. Me dijo que era porque el corazón no es solo un órgano que manda oxígeno a tu cuerpo, sino que es el almacén de nuestros sentimientos. Y que después de una experiencia traumática como un infarto nos ponemos muy tristes. Que solo nos recuperamos, solo volvemos de verdad a la vida cuando nuestro corazón vuelve a bombear nuevas emociones, nuevos sentimientos", explica.

"De alguna manera siento que hoy todos estamos saliendo de un ataque al corazón. Y hoy puedo decir que aquella enfermera tenía razón. Estar vivos no es solo volver a respirar, no. Es volver a fabricar emociones. Es volver a descubrir el regalo más grande que tiene la vida: las personas que amas, la buena gente, pasear, sentir el sol, el mar, Andalucía, tu tierra, su arte, su alegría. Ahora sal a vivir con ganas, disfruta la vida, con todo corazón. Intensamente".