El productor de Jarabe de Palo escribe una emocionante canción para Pau Donés: "Volábamos tan alto"

La semana pasada se cumplía el segundo aniversario de la muerte de Pau Donés, que nos dejaba un 9 de junio de 2020 a causa del cáncer de colon que padecía. Pese a que la voz de Jarabe de Palo se apagó, sigue igual de presente en la música. Sus compañeros de profesión le siguen recordando, al igual que su banda. El productor Micky Forteza-Rey ha sido uno de los últimos en rendirle homenaje con una canción dedicada al grupo, y en especial a Donés. "Para ti Pau, siempre desde el cariño y el respeto, aquí seguimos pisando a fondo y sin dejar de acelerar. Espero que te guste, compadrito. ¡No te olvidamos!", decía el productor.

Fueron 20 años que no cambiaría por nada

Todo lo que había soñado convertido en realidad

Música, escenarios hasta llegar a rozar el cielo

Volábamos tan alto que costó aterrizar

Pisando a fondo y sin dejar de aterrizar

Llegó la hora de por fin volver a casa

Así comienza el tema 'Vuelvo', basado en los inicios de Jarabe de Palo en 1995 y con un emotivo mensaje para Pau Donés, líder de uno de los grupos que más éxito ha tenido en el panorama musical español. Una trayectoria a la que el productor rinde homenaje en este tema que ya forma parte de la historia de la banda.

El recuerdo de Donés

No solo él ha recordado a Pau Donés en estos días, en Uppers tuvimos la oportunidad de charlar con Álex Tenas, batería de Jarabe de Palo, que asegura que piensa mucho en él, "unas veces lloro y otras me hace reír", asegura.

"Desde que nos conocimos hubo una conexión bestial y eso se transmitía. Nadie en la banda imaginaba lo que estaba a punto de nacer, cuando ni siquiera teníamos dinero para pagar la habitación de los hoteles, pero nos llegaba el calor de la gente. Había algo especial en aquellos primeros momentos, algo sanador en nuestra música que se mantuvo siempre. Pau decía siempre que los músicos se ríen mucho sobre el escenario y es cierto", cuenta Tenas sobre los inicios del grupo.

Sobre Pau, se queda con los momentos mágicos, como cuando antes de un concierto le vio "en su camerino reventado por la quimioterapia y di por hecho que suspenderíamos la actuación. En cuanto subió al escenario, cantó y saltó contagiando a todos con su fuerza. Él era así. Su energía era pegadiza y por eso el público nos transmitía a nosotros esa emoción. Esa noche la gente bailó y vibró. Ahí descubrí, una vez más, que la música de Jarabe de Palo es sanadora", recuerda.