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El mítico periodista del corazón, Jesús Mariñas, ha fallecido a los 79 años tras sufrir un cáncer de vejiga. El periodista llevaba ingresado desde principios de abril por problemas derivados de la enfermedad, en concreto por efectos secundarios del tratamiento que estaba tomando. Sin pelos en la lengua y siempre acompañado de su bigote y sus camisas coloridas, Mariñas ha sido uno de los profesionales del corazón más queridos y reconocidos tanto en prensa como en televisión, incluso en radio.
Hace solo unas semanas la periodista y amiga de Mariñas, Chelo García Cortés le visitaba en el hospital. "Somos de una generación que luchamos por la vida, por seguir en activo. Hemos estado recordando nuestra vida porque nos conocemos desde el año 74. Él se deja querer. Lo que sí tengo que decir es que Jesús tiene a su lado a la mejor persona que podría tener", decía en Sálvame en referencia a su marido, Elio.
Elio Valderrama se ha mantenido siempre junto al periodista. Se conocieron en 1990 por medio de un amigo que tenían en común y al poco tiempo comenzaron su relación, aunque no fue hasta 2016 cuando contrajeron matrimonio ante notario. Hace tiempo el periodista reconoció que ambos mantenían una relación abierta, "cada uno ha hecho su vida, en la que ha habido otras relaciones, porque si no es así no aguantas ni 15 años. Nadie en el mundo aguanta 27 años siendo fiel carnalmente".
El 21 de abril fue el cumpleaños de Elio, fotógrafo venezolano, y lo celebraba en la habitación de hospital junto a Mariñas, del que no se ha separado durante el poco más de un mes que ha estado ingresado. "Es buenísima persona además de ser muy guapo. Tiene un carácter increíble y me hace la vida muy agradable. Y te lo digo después de 30 años", declaró el periodista hace tiempo a La Vanguardia.
Mariñas nunca se ha planteado ser padre, lo reconoció varias veces, una espina que quizá se quitó al criar a un sobrino, que sigue viviendo en Galicia. De sus hermanos se sabe que dos de ellos fallecieron de pequeños, mientras que con otros de ellos nunca mantuvo buena relación, ya que desveló que le pegaba palizas.
Mariñas fue hijo de madre soltera y, en una entrevista de 2017 en el Deluxe, recordaba que nunca le dijo que era gay y que falleció sin saberlo, aunque cree que ella lo intuía, pues conoció a varios de sus novios, pero presentándolos siempre como amigos. No obstante, en la entrevista el periodista llegó a decir que, de forma triste, se sintió liberado tras la muerte de su madre. Sobre su padre, en cambio, en alguna ocasión llegó a decir que lo vio una vez y que siempre ha condenado su ausencia.
Antes del cáncer de vejiga, Mariñas pasó uno de piel, una etapa complicada de su vida en la que recordaba que la gente rumoreaba que no padecía la enfermedad, sino que tenía sida, cosa que a él le molestaba especialmente por la imagen que estaba dando en televisión.
Su carrera como periodista la comenzó en Coruña, pero no fue hasta que, tras pasar por Castellón, le mandaron a Barcelona, donde contó que le "llegó la libertad total". Entre los 60 y 70 ya colaboraba en programas de radio y en la prensa, pero en los 80 y 90 se sumergió por completo en la prensa del corazón, trabajando en todo tipo de programas y revistas.
Pero sin duda, aunque su breve etapa en Sálvame dejó grandes momentos, fue uno de los grandes colaboradores de Tómbola, donde compartía plató con Lydia Lozano o Karmele Marchante, recordemos su mítica frase: "¡Que te calles, Karmele!".
Mariñas mantenía buena relación con muchos de sus compañeros, especialmente con García Cortés, a la que en su visita al hospital le había prometido que en unos meses harían los dos un viaje a Nueva York con sus respectivas parejas. También guardaba buena relación con Jorge Javier Vázquez, al que acudió a ver al teatro en febrero, o con José Manuel Parada.