Lujo en el mar: así es el yate de Steven Spielberg que está a la venta por 131 millones de euros

Hablar de Steven Spielberg es hablar de una de las personas más famosas e importantes de la historia del séptimo arte. Director de una extensa filmografía que incluye clasicazos como Tiburón, E.T. El Extraterrestre, Jurassic Park o Salvar al Soldado Ryan, el cineasta ha marcado a varias generaciones con sus dramas e historias de aventuras y ciencia ficción y conseguido una sólida reputación que no ha dejado de darle beneficios en sus cincuenta años de trabajo.

Según los datos de la prestigiosa revista Forbes, las películas de Steven Spielberg han logrado recaudar en torno a 10 mil millones de dólares en todo el mundo. Él, por su parte, cuenta con un patrimonio de más de 3.700 millones de dólares (sobre 2.900 millones de euros) y gana anualmente unos 150 millones (en torno a 127 millones de euros): casi nada.

Con esta ingente fortuna bajo el brazo, a nadie debería sorprenderle que a lo largo de los años se haya dado algún que otro caprichito (o caprichazo, según se mire). Uno de ellos es el impresionante megayate que se compró en 2010, una embarcación de 282 pies de largo y 14 metros de ancho equipada con un sinfín de lujos y comodidades para poder surcar los mares por todo lo alto.

Bautizado como Seven Seas en honor a sus siete hijos, este yate fue construido por el astillero Oceanco y diseñado por el estudio italiano Nuvolari & Lenard, y puede alcanzar una velocidad máxima de 20 nudos y una velocidad de crucero de 15. A bordo de él, Steven Spielberg ha podido recorrer incontables millas, pero ahora, tras once años de disfrute, ha decidido ponerlo a la venta. ¿El precio? Nada menos que 160 millones de dólares, unos 131 millones de euros al cambio, según recoge la web de venta de barcos de superlujo Yatch Harbour.

Como decíamos, esta embarcación cuenta con toda clase de lujos para hacer del viaje en alta mar una experiencia inolvidable. Completamente personalizado al gusto del cineasta, el Seven Seas es una monumental construcción de cuatro plantas con capacidad para albergar a entre quince y veinte personas en siete camarotes al estilo suite.

Estas habitaciones pueden diferenciarse en tres tipos: las de invitados, la cabina VIP y la suite principal, aunque todas ellas cuentan con varias comodidades. En el caso de los invitados, estos añadidos son más modestos, reduciéndose a un baño privado, una sala de estar y varios vestidores, pero la cosa sube de nivel si ponemos el ojo en las otras dos estancias. Así, el camarote VIP, que puede dividirse en dos cabinas distintas, cuenta con varios armarios, dos cuartos de baño privados y una monumental sala de estar, mientras que la suite principal está equipada con un enorme baño privado, una bañera de hidromasaje, varios armarios e incluso una terraza propia.

Más allá de los dormitorios, el barco cuenta con un gimnasio, varios spas, una enorme piscina, un jacuzzi, un espacio recreativo para jugar al ajedrez y un amplio salón de corte clásico en el que hay desde una zona bar y un comedor hasta una biblioteca. La embarcación dispone, además, de varios televisores repartidos a lo largo de todo su espacio y con una sala de cine perfectamente equipada, un añadido que, tratándose de Steven Spielberg, no podía faltar para que pudiese sentirse como en casa.

Otro aspecto que llama la atención de este megayate es su ascensor de cristal, que permite llegar a la mayoría de las cubiertas. El broche de oro, finalmente, lo pone el garaje, un espacio en el que se pueden encontrar varias embarcaciones de recreo.