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Ivana Trump, primera mujer del expresidente Donald Trump, murió en julio de 2022, a la edad de 73 años, después de un aparatoso accidente en su casa de Manhattan. La antigua modelo de origen checo, que se dio a conocer en sus inicios como patinadora sobre hielo, murió debido a "lesiones por impacto contundente en el torso", según informó la Oficina Forense de Nueva York. Los médicos de la ambulancia que acudieron a su casa la encontraron inconsciente al pie de la escalera sin que pudiera hacer nada por salvar su vida.
Casi siete meses después de su muerte, se ha abierto su testamento y se han conocido los detalles más curiosos de su último voluntad. La niñera que crio a sus hijos es uno de los principales beneficiados.
La irlandesa Dorothy Curry fue durante muchos años la persona de confianza de Ivana. Trabajó durante muchos años en el domicilio familiar como asistenta y niñera. En ese tiempo se ganó el aprecio de los Trump y esto se ha visto recompensado: según Forbes y Newsweek, Ivana Trump le ha dejado en el testamento una propiedad en Florida valorada en un millón de dólares, además de su yorkshire llamado Tiger.
En su autobiografía, publicada en 2017, Ivana Trump ya dejó muestras de su afecto hacia Dorothy, a quien catalogaba como una mujer enérgica y brillante. La niñera es la persona que inculcó los valores cristianos en sus tres hijos. "La religión no juega un papel importante en mi vida, pero me alegro de que los niños hayan crecido hablando con Dios", explicaba Ivana.
En el mismo libro, titulado 'Raising Trump', Eric, uno de los hijos del matrimonio, describe a Dorothy como su "segunda madre": “Me ha criado desde que era un bebé, y estamos increíblemente unidos. La quiero inmensamente”, afirmaba en la autobiografía de su madre.
Se estima que el patrimonio de Ivana Trump ronda los 34 millones de dólares. De ellos, un millón será para Dorothy. Igualmente, ha dejado una propiedad en St. Tropez, en la costa sur de Francia, para su amiga Evelyne Galet. El resto de su fortuna será repartida a partes iguales entre sus tres hijos: Ivanka, Eric y Donald. Su ex no recibirá nada del legado de Ivana.
La exmodelo disfrutaba de muchos bienes materiales que ahora tendrán distintos destinos. El lujoso vestuario será donado a la Cruz Roja Americana y al Ejército de Salvación, aunque los abrigos de piel se venderán. Los beneficios se repartirán entre sus hijos.
Ivanka, Eric y Donald Junior no necesitan la fortuna de su madre para ser ricos. En 2019, Forbes estimó la fortuna de Eric y Donald en 25 millones de dólares, mientras que la de su hermana Ivanka ascendía a 375 millones, conseguidos a través de sus negocios de moda y de su matrimonio con el empresario inmobiliario Jared Kushner. Además, el patriarca de la familia, Donald Trump, posee un imperio cifrado en 3.200 millones de dólares.
Como es previsible, los herederos de Ivana Trump tendrán que tributar por estas ganancias. Los Trump deberán presentar una declaración federal del impuesto de sucesiones, ya que el patrimonio de Ivana es superior a los 12 millones de dólares que el Estado permite heredar libre de impuestos. El gobierno, por tanto, se quedaría con nueve millones de dólares, el 40% de la herencia dispuesta por Ivana.