Ana Rosa, sobre el apoyo de su marido Juan durante su enfermedad: "Sufrió mucho, adelgazó más que yo"

  • Ana Rosa volvió a la televisión hace unos meses tras superar el cáncer y ahora hace balance de su último año

  • La presentadora ha valorado el apoyo incondicional de quienes acompañan a los enfermos, en su caso, su marido Juan Muñoz

  • Ella y su familia han aprovechado para vivir una Navidad diferente con un viaje fuera de España

Ana Rosa Quintana volvió hace unos meses a su puesto de presentadora en ‘El programa de Ana Rosa’ tras casi un año apartada mientras se trataba el cáncer de mama que le fue diagnosticado en 2021. Una enfermedad que ha superado con éxito y que, como dijo en su regreso, seguirá revisando y cuidándose. Ahora, la presentadora, que lleva 18 años al frente de su programa, ha hecho un balance de todo lo que ha supuesto para ella y su familia, especialmente su marido, esta etapa.

Unas navidades diferentes

Lo ha hecho en una entrevista con Rosa Villacastín para Diez Minutos. La presentadora ha disfrutado de la Navidad en familia y rodeada de los suyos, habiendo dejado atrás momentos complicados relacionados con su enfermedad que también ha vivido en primera persona su marido, Juan Muñoz, que le ha acompañado en todo el proceso, convirtiéndose en su mayor apoyo.

“Este año hemos pasado unas navidades casi como cuando era adolescente porque hemos aprovechado para hacer un viaje a Tailandia toda la familia, mis tres hijos, mi marido y yo”, explica la periodista, que es consciente de que, pese a no pasar una buena etapa, todo ha ido bien. “He tenido bastante suerte, han salido bien las operaciones, el tratamiento, no he tenido efectos secundarios, he tenido compañía, mucho cariño, y por otra parte ha sido muy emocionante”.

El apoyo de su marido

Ha querido hablar especialmente de lo que su marido le ayudó a lo largo de todo el proceso de tratamiento y recuperación, un papel que en ocasiones no llega a ser del todo valorado, la de quienes acompañan a los enfermos durante todo el proceso. “Juan ha sufrido mucho, no lo ha dicho ni demostrado, pero adelgazó un montón, más que yo, supongo que es un esfuerzo tener una persona, en este caso a mí, de la que no han dejado de preocuparse ni los chicos, ni Juan, ni mis amigas”, cuenta Ana Rosa.

“Me ha hecho sentir la mejor del mundo, cuando me puse rubia me decía: ‘tienes una cabeza preciosa’. Es verdad que mala cara nunca he tenido, ni mal color, pero cuando se cae el pelo y las pestañas…”, relata la comunicadora.

Su cambio de look

Precisamente, sobre su cambio de aspecto atreviéndose con el pelo corto y rubio, admite que siempre pensó en dejárselo así cuando abandonase la televisión. “Han sido las circunstancias, yo aguanté el pelo casi hasta el final, pero las cuatro últimas quimios eran distintas. El primer día que llego al baño, y me quedo con un mechón en la mano, decidí afeitarme la cabeza. No quería pasar por ese momento de ver que se te caen los mechones", reconoce.