Luis Rojas-Marcos acaba su última maratón de Nueva York a los 78 con su hija Laura animando: "Orgullosa"

  • El psiquiatra Luis Rojas-Marcos ha completado su última maratón de Nueva York a los 78 años

  • Su hija Laura ha ido hasta la ciudad para animarle y acompañarle y ha contado el proceso en sus redes sociales

  • Ambos vivieron la maratón con un gran ambiente después de que el año pasado no pudiese celebrarse debido a la pandemia

La maratón de Nueva York volvía ayer a poner patas arriba la ciudad con su 50 edición después de que el año pasado no pudiese celebrarse debido a la situación en la que se encontraba la urbe y el país por la pandemia provocada por la covid-19. Este año ha vuelto con algunos protocolos de seguridad para la contención del virus, pero al menos ha podido celebrarse, y entre los corredores había uno especial: el psiquiatra Luis Rojas-Marcos. Su hija Laura Rojas-Marcos ha viajado hasta Nueva York para seguir su carrera y lo ha ido contando a través de su cuenta de Instagram.

Su última maratón de Nueva York

La carrera de su padre no fue una cualquiera. Ya desde uno de sus primeros posts la psicóloga avisaba que era especial no solo por ser la 50 edición de la carrera, también porque sería la última que haría su padre a los 78 años, su maratón número 27 en Nueva York, que se dice pronto. "Me siento tan orgullosa de él, de todo su esfuerzo, perseverancia y determinación. Ahí estaremos mi hermana Carolena y yo para darle ánimos y fuerza por las distintas zonas de la ciudad", escribía.

El domingo lo comenzó explicando cómo sería el trayecto que haría su padre durante el día para completar el maratón de Nueva York. "Ha salido en la primera ola de corredores y acaba de pasar el primer puente de Verrazano Bridge de Staten Island a Brooklyn. Me comenta que está contento, nervioso, y con ilusión de poder llegar a la meta. Irá a su ritmo, que por cierto es muy bueno", comentaba en una de sus publicaciones. Además, estuvo en varios puntos para animarle, especialmente en la avenida que debía subir cuesta arriba para llegar hasta el Bronx, la más dura según ella por la pendiente.

Emociones a flor de piel

El domingo se presentó con buen tiempo, un día soleado y algo fresco ideal para completar la carrera donde el ambiente era inmejorable. "La gente está muy contenta de poder volver a retomar este gran día después de casi dos años tan duros por la pandemia", aunque han sido menos participantes que en otras ediciones, unos 30.000 frente a los 50.000 que suelen correr. La alegría era notable, pues cuenta que había mucho público e incluso músicos para animar por diferentes zonas. "Yo me emociono constantemente, siento que se me pone la piel de gallina, se me saltan las lagrimillas y siento una emoción muy intensa".

Y si había duda alguna, sí, Luis Marcos-Rojas completó la maratón a sus 78 años y su sonrisa al llegar a meta lo decía todo. "¡Puro orgullo! Mi querido padre ha conseguido su propósito de correr y terminar su última maratón de Nueva York. Dice que ha sido duro, largo y doloroso, pero está muy contento. Ahora toca celebrarlo en familia".

Todo este camino lo ha hecho mencionando continuamente la expresión 'kama muta', un término que proviene del sánscrito y que significa "conmoverse, llenarse de amor o admiración".