Astenia primaveral: ¿qué es y cómo acabar con ella?

  • Cansancio, falta de fuerzas, de energías... son algunas de las sensaciones habituales que sienten muchas personas cuando nos metemos en primavera

  • Se trata de un trastorno adaptativo que produce una sensación de debilidad y falta de vitalidad tanto física como intelectual en nuestro organismo debido al cambio de estación

  • En Uppers te damos algunos consejos para reducir los síntomas de la astenia primaveral

Con la primavera es habitual tener sensación de decaimiento, falta de energía o cansancio tanto físico como intelectual que nos impide desarrollar las tareas diarias con normalidad. Es lo que conocemos como astenia primaveral.

Las causas por las que puede aparecer la astenia primaveral son diversas: los cambios de temperatura que se dan en etapa época, los cambios de hora que se dan siempre en la misma época y los hábitos de vida que se producen en esta estación, hacen que en algunas personas afloren sentimientos de nostalgia, tristeza o apatía.

En un inicio, dichos síntomas pueden no parecer preocupantes, pero a medio y largo plazo pueden acabar provocando problemas más graves que acaben requiriendo tener que ir a un médico para que los síntomas se paren.

A pesar de los problemas que puede ocasionar en las personas la astenia primaveral, esta no se considera una enfermedad dentro del Catálogo de Clasificación Internacional de Enfermedades de la Organización Mundial de la Salud. La cuestión es que, más que una enfermedad, es un estado que está relacionado con desórdenes en el mecanismo fisiológico normal de adaptación del cuerpo a condiciones variables propios de los cambios de estación.

Síntomas típicos de la astenia primaveral

Debemos tener en cuenta que la astenia no tiene unos síntomas claramente definidos, sino que se engloban en una sensación de tristeza inexplicable que pueden llegar a generar la sensación de no tener ganas de nada.

A estos sentimientos tan melancólicos, se le pueden sumar las afecciones que tienen que ver directamente con el malestar físico.

  • Alteraciones del estado general (cansancio, fatiga especialmente por la mañana, debilidad general).
  • Hipotensión, mareos.
  • Dolor muscular y articular.
  • Dolores de cabeza constantes.
  • No poderse concentrar en ningún ámbito: falta de memoria, fatiga intelectual…
  • Cambios de humor: irascibilidad, tristeza, melancolía y desasosiego.
  • Pueden aparecer problemas digestivos: dolores, falta de apetito, aumento excesivo de hambre…
  • Trastornos del sueño: insomnio o intensa sensación de sueño constante.
  • Dejar de tener deseo sexual.

Todo esto se puede ver incrementado si el estado de ánimo de la persona está en un momento de bajeza. De esta manera, el sistema inmunológico se ve todavía más afectado y eso hace a las personas más propensas a sufrir enfermedades que tengan que ver directamente con el incorrecto funcionamiento de dicho sistema.

¿Cómo combatir la astenia primaveral?

  • Ten una higiene de sueño adecuada: mantén horarios fijos para acostarte y levantarte. Debes descansar un mínimo de 7 horas diarias. Debes dormir en un ambiente adecuado y confortable. Es esencial que cenes de manera ligera y unas 2 horas antes de irse a dormir para así evitar que la digestión se realice sin interferir en la conciliación del sueño.
  • Puedes practicar deporte para que te ayude a liberar tensiones, mantener el cuerpo vivo y facilitando el descanso nocturno. Si se hace deporte al aire libre será incluso mejor, ya que el sol aporta salud y vitalidad.
  • Es muy importante mantener una postura positiva ante las situaciones en las que se pierde el control. Todo lo que puede conllevar un cambio de estado de ánimo ha de relativizarse y recuperar la voluntad y las ganas de hacer. Es importante que los momentos de malestar y estrés se minimicen, ya que todo eso puede repercutir negativamente en tu salud.
  • Reducir el consumo de sustancias tóxicas como el alcohol, el tabaco u otras sustancias estimulantes que pueden poner en riesgo el equilibrio corporal y mental. Abusar de medicamentos relajantes tampoco es bueno, ya que te haces dependiente de ellos y puede interferir negativamente en tus rutinas de sueño.
  • Es importante tener controladas las emociones, ya que la astenia primaveral, como hemos comentado, comparte síntomas con la depresión. Es conveniente intenta afrontar los problemas con una actitud más positiva y, si no es posible, acudir a profesionales que nos ayuden a controlar nuestras emociones.
  • Una dieta equilibrada es uno de los puntos clave a la hora de mantener el tono vital y poder prevenir cualquier alteración de sistema digestivo. Es importante que exista una abundancia de frutas y verduras frescas de manera diaria. Hay que limitar la toma de grasas y el exceso de carne y también tomar abundante agua. De esta manera, se da un equilibrio hídrico adecuado que mejora las funciones digestivas e intestinales. De la mano de esta, va la fibra. Por último, es importante controlar la ingesta de café u otras sustancias excitantes.
  • Toma el sol. Aprovecha un ratito al día para tomar la luz solar, no olvides usar protección solar en cualquier época del año.
  • Recurre a ayudas naturales como la jalea real, ginseng, polen, germen de trigo o levadura de cerveza pueden reforzar el sistema inmune. Puedes consultarnos y te recomendaremos el producto adecuado según tu caso.