Cómo eliminar las manchas de lejía en la ropa: del tiosulfato de sodio al vinagre

  • A la hora de manipular lejía, debemos ser extremadamente cuidadosos con nuestra ropa, ya que una mancha puede arruinar por completo nuestras prendas

  • Si la lejía nos salpica mientras limpiamos, debemos actuar con rapidez y meter la prenda cuanto antes en la lavadora para neutralizar el efecto decolorante que tiene este producto

  • Si tras lavar la ropa descubrimos que la mancha decolorada permanece, podemos recurrir a varios trucos caseros para tratar de eliminarla

La lejía es uno de los productos de limpieza que más usamos en nuestro día a día. Este compuesto químico se caracteriza por su gran poder desinfectante, con el que puede acabar con multitud de microorganismos, y puede utilizarse tanto para destruir las bacterias, hongos y gérmenes de cualquier superficie como para neutralizar los olores, potabilizar el agua o blanquear la ropa, entre otros. 

A la hora de utilizar este producto, sin embargo, es imprescindible tomar precauciones, ya que se trata de un compuesto extremadamente tóxico que puede ser perjudicial para nuestra salud. Por ello, siempre que vayamos a limpiar con lejía debemos ponernos guantes para no sufrir posibles irritaciones y evitar cualquier tipo de contacto con los ojos para prevenir el riesgo de sufrir un glaucoma. Además, se debe mantener siempre alejada de los niños para impedir que puedan consumirla. 

Más allá de los problemas que la lejía puede causar desde el punto de vista de la salud, a la hora de manipular este producto también debemos ser cuidadosos para que no salpique nuestra ropa, ya que las manchas de lejía pueden arruinar por completo nuestras prendas.

En realidad, las manchas de lejía no son manchas como tal, sino decoloraciones que destruyen el color provocando que aparezcan zonas amarillentas, rosadas o amarronadas. Dependiendo del tamaño de la zona afectada, sus efectos serán distintos: en los casos más extremos, no nos quedará otra que despedirnos de la prenda, pero en los más leves, cuando la mancha es aún pequeña, podemos mitigar el impacto si actuamos con rapidez.

¿Cómo se pueden eliminar las manchas de lejía de la ropa? 

Cuando la lejía salpica nuestra ropa, lo primero que debemos hacer antes de que se forme una mancha es lavar las prendas afectadas para neutralizar el efecto decolorante del producto. En estos casos, se recomienda hacerlo a mano ya que es mucho más rápido, aunque también se puede poner la lavadora siempre y cuando nos aseguremos de no mezclar la prenda afectada con otras. 

Si tras lavar la ropa descubrimos que la mancha no ha desaparecido, podemos recurrir a algún remedio casero para intentar eliminarlas. Uno de ellos consiste en frotar la zona afectada con un pedazo de algodón impregnado de vodka y de manera muy suave. Al hacerlo, podemos disminuir la zona blanqueada, aunque deberemos ser cuidadosos para que el remedio no sea peor que la enfermedad, como quien dice.

Otra solución consiste en aplicar una mezcla de tiosulfato de sodio con agua sobre la zona afectada. Para ello, tendremos que mezclar el compuesto en una taza de agua, mojar un trapo y aplicar la solución sobre la zona afectada durante unos diez o quince segundos. Transcurrido este tiempo, tendremos que hundir la prenda en agua fría y ponerla a secar a la sombra

Si la salpicadura de lejía ha afectado a una prenda blanca, podemos utilizar soluciones como blanqueador, bicarbonato de sodio o incluso vinagre para remediar el problema. En el primer caso, deberemos leer y seguir atentamente las instrucciones del fabricante. 

En el segundo, deberemos aplicar el bicarbonato directamente sobre la zona afectada y utilizar un cepillo para extenderlo, dejando actuar la solución durante unos veinte minutos y procediendo, posteriormente, a lavar la prenda. En el tercero, mientras, tendremos que mezclar vinagre con agua oxigenada y aplicar la mezcla a la mancha.

Si la mancha es de gran tamaño y no desaparece, además, podemos recurrir a un tinte del mismo color que la prenda para cubrir la zona o, en su defecto, a una pintura especial para la ropa. No obstante, debes tener en cuenta que si la prenda afectada es oscura y la mancha es demasiado grande, lo más probable es que no puedas arreglar por completo los desperfectos.