Su construcción supuso todo un adelanto en las llamadas presas de arco. La idea partió de dos vecinos de Muchamiel, Miguel Alcaraz y Pere Izquierdo, que propusieron represar las aguas del río Monnegre alzando un muro en la garganta formada por los montes Mos del Bou y La Cresta, en el término municipal de Tibi, en Alicante. Todo esto ocurría hace la friolera de cuatro siglos y medio, en 1580. Catorce años después, exactamente hace 430 años, entraba en funcionamiento el embalse en funcionamiento más antiguo de Europa.
Ubicado en los términos municipales de Tibi y Jijona, provincia de Alicante, Comunidad Valenciana, el embalse fue una proeza de la ingeniería en su época por sus particulares características: una pared curvada de gruesos sillares labrados que se alza 46 metros en una garganta formada entre dos montes. La parte más alta y más ancha de la presa tiene 65 metros de longitud y la más estrecha, en su parte inferior, apenas 9.
Originalmente, el embalse tenía una capacidad de entre 4 y 5,4 millones de metros cúbicos (la mayor de los embalses de la época), misma que ha ido mermando con los años y los acarreos depositados. Y aunque sufrió una importante rotura en 1697, entró de nuevo en servicio en 1738. Y ahí sigue. En su momento, la presa disponía de un sistema hidráulico compuesto de toma de agua a diferentes alturas, aliviadero de superficie y un desagüe de fondo para la limpia periódica de los acarreos depositados en el fondo de la presa.
El pantano de Tibi, guardado por la presa, se puede alcanzar a pie por una ruta de senderismo de unos tres kilómetros y bien señalizada con las siglas BIC, por Bien de Interés Cultural, estatus que el conjunto alcanzó en 1994, a los 400 años de su construcción.
Otro punto de interés durante la visita, es la llamada 'casa del responsable de la presa' (actualmente en desuso) que contaba con una pequeña capilla cuya entrada está adornada con un escudo real que data del año 1795, durante el reinado de Carlos IV.
En la actualidad el embalse pertenece al Sindicato de Riegos de la Huerta de Alicante, que tiene su sede en la localidad de Muchamiel, y que lo gestiona para el riego por el canal de la Huerta.
Uno de los rastros en activo más interesantes de la ingeniería española del s. XVI y un paraje digno de visitar por su belleza.