La aventura de los 'blue hole': cruzar al inframundo a través de cuevas submarinas

  • Los agujeros azules se han convertido en lugares ideales para practicar submarinismo

Desde que Julio Verne cautivara al mundo con su Nautilus en '20.000 leguas de viaje submarino', las profundidades han generado una importante atracción para el hombre. Lo desconocido y el reto de llegar más lejos disparan la adrenalina de aquellos que se sienten como pez en el agua a cientos de metros bajo la superficie. Ir en busca y descubrimiento de los 'blue holes' se ha convertido en un reto indiscutible para los más intrépidos. Y nosotros sabemos cuáles son los más bellos.

Los primeros agujeros azules se descubrieron accidentalmente en los sesenta y crearon una fascinación sin precedentes. Se trata de grandes depresiones del lecho marino que tienen como resultado impresionantes pozos de, en algunos casos, profundidades abisales. Para algunos son 'puertas' al inframundo, para otros, lugares de culto...

Con los nuevos hallazgos en el Mar de China y en la Gran Barrera australiana ha resurgido con fuerza el interés por estos gigantes silenciosos de intenso color azul. Aquí te traemos cinco de los más hermosos y diferentes blue holes del planeta para que puedas elegir cuál visitar primero. Sea cual sea, comprobarás cómo la Naturaleza por sí sola es la mejor escultora y la mejor pintora del mundo.

El gozo de Malta, empezamos cerca de casa

El 'blue hole' de la isla de Gozo, en Malta, es una peculiar cueva vertical en este archipiélago del Mediterráneo. Se desploma hasta los 27 metros de profundidad y es, para muchos, una de las piscinas naturales más bellas del mundo. Hasta hace poco, desde aquí, se podía contemplar la 'Ventana Azul'; un impresionante arco natural que, desafortunadamente, se desplomó hace unos meses a causa de una gran tormenta.

Hay diversos proyectos arquitectónicos para recuperar esa magnífica estructura, como la futurista intervención que quiere llevar acabo el estudio Svetozar Andreev… Aún así la zona sigue conservando todo su esplendor natural y es una estupenda primera opción para quienes quieren iniciarse en esto de los 'blue holes'.

Para alojarte, opta por el ThirtySeven Gozo, un boutique hotel en el corazón de una de las villas más bonitas de toda la isla de Gozo. Consagrado al arte, es un ecléctico homenaje al diseño internacional.

En el Caribe más salvaje

A pocos kilómetros de la costa de Belice se dibuja sobre la superficie un círculo perfecto de profundo color cobalto. Recibe el sobrenombre de "el grande" por sus impresionantes dimensiones: 318 metros de diámetro y una profundidad de 124 metros. Por su privilegiada localización y su espectacular belleza fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Su fama como lugar para el buceo le precede. Buena parte de esa reputación le llegó cuando el mítico Jacques Cousteau lo eligió como uno de sus cinco sitios favoritos del mundo para bucear. La riqueza de sus profundidades bien se merece cruzar el Atlántico.

Para alojarte, elige el magnífico Thatch Caye Belize un eco-lodge situado en una paradisiaca isla privada, con bungalows sobre el agua. Con una capacidad para sólo 30 personas es un lugar de ensueño.

El ojo del Dragón, el más profundo del mundo

Descubierto en el mar de China esta inmensa oquedad es el 'blue hole' más hondo del mundo. Supera en más de 100 metros al célebre 'Deans Blue Hole', de Bahamas, con una profundidad de más de 300 metros. Situado a unos veinticinco kilómetros de las islas Paracel es un lugar lleno de misterios. Según la leyenda en sus profundidades habita el Rey Mono, uno de los principales personajes de la mitología china.

Para alojarte, el mejor lugar es la isla de Hainan, un edén tropical frente a la China continental. Aquí ha abierto recientemente The Sanya Edition, una creación del gurú hotelero Ian Scharger. Un poco de lujo occidental nunca viene mal, para compensar.

En el parque del oso Yogui

Conocido por todos por su más célebre (y animado) habitante, el Parque Nacional de Yellowstone guarda un secreto enigmático como pocos. Se trata del Grand Prismatic Spring, la tercera fuente de agua termal más grande del mundo. La composición del suelo y el agua, en combinación con el calor que emana de las profundidades, hacen que la tierra de la superficie varíe de color cada pocos centímetros. El resultado es un prisma multicolor que va del azul polar al naranja azufre. Todo un espectáculo que ninguno de los filtros de Instagram podría conseguir. Sí, a veces, la realidad supera la ficción.

Para alojarte, reserva en el Rusty Parrot Lodge. Está considerado como el mejor hotel de la zona y es un magnífico ejemplo de la hospitalidad americana. Sus cabañas de madera, al más puro estilo far west, ofrecen unas vistas infinitas de todo el parque y visitas que sólo se pueden realizar si te alojas aquí.

Donde las Antípodas se hunden hasta el abismo

Allí donde colgaba el Non Plus Ultra encontramos el diminuto país de Palaos, formado por unas trescientas islas diseminadas en Oceanía. Totalmente deshabitadas, guardan tesoros naturales de prístinas aguas, bosques tropicales intactos y formaciones rocosas con las formas más inusuales. En una de esas islas, en un canal rodeado de sinuosas colinas, se abre uno de los agujeros azules más bellos del mundo. Apodado 'the eye', por su peculiar forma de ojo, para muchos tiene un componente místico. Sin duda su intensa mirada azul es cautivadora.

Para alojarte, no hay mejor sitio que el nuevo Pristine Villas Hotel. Un lugar único, construido entre la tierra y el mar, con impresionantes villas sobre el lago o el océano. El estilo minimal japonés de sus construcciones es el mejor marco para un entorno natural que muchos consideran el último paraíso terrenal.