El creador de la vacuna de Pfizer contradice lo que se pensaba hasta ahora: “Las personas vacunadas no contagian”

  • Sahin asegura que la vacuna reduce un 92% el riesgo de contagio

  • La vacuna de Pfizer es eficaz contra la variantes británica

  • Ante nuevas cepas, Sahin recomienda una tercera dosis de la vacuna

Si las personas vacunadas contagiaban o no era una de las grandes cuestiones que rodeaban la campaña de inmunización que, desde finales del pasado año, se está llevando a cabo en nuestro país. Virólogos y microbiólogos afirmaban que, pese a que la capacidad de transmisión se vería reducida, todavía era posible. La científica jefe de la OMS, Soumya Swaminathan, aseguró en una rueda de prensa que las personas vacunadas contra el coronavirus pueden contraer el virus y pueden contagiarlo a otros aunque no se pongan enfermas o no presenten síntomas, pero su carga viral será menor. Desde la Sociedad Española de Vacunología siguieron la misma tesis y afirmaron que, hasta el momento, no se sabía si los anticuerpos podían parar la replicación del virus en el aparato respiratorio, e incluso si así lo hicieran, que sería extremadamente complicado predecir que una persona no pudiese transmitir la enfermedad. Sin embargo, todas estas dudas parecen quedar ahora resueltas. Ugur Sahin, el fundador de Biontech, el laboratorio encargado de la vacuna de Pfizer, afirma que los primeros datos recogidos en Israel, el país con la vacunación más adelantada, apuntan a que su vacuna covid sí que evita el contagio.

Las claves del optimismo

El creador de la vacuna de Pfizer ha dado un soplo de optimismo en mitad de la pandemia. En una entrevista concedidad al diario alemán Bild, ha asegurado que, con los datos de un estudio hecho sobre el terreno "la cantidad de personas para las que la PCR es positiva y que, por lo tanto, son potencialmente contagiosas, se reduce en un 92 por ciento después de la vacunación".

Es decir, que la vacuna no solo protege del virus, sino que también evita la transmisión. Lo que supone un gran paso para lograr la deseada inmunidad de grupo, que, según el Gobierno se conseguiría cuando al menos el 70% de la población esté vacunada y sería la llave para una normalidad como la de antaño.

No obstante, Sahin afirma que la vacuna tendrá que ser inoculada con cierta frecuencia para evitar que la crisis actual se reproduzca en años posteriores. "Si queremos que el virus se propague con más dificultad en el futuro y queremos reducir las infecciones, la vacunación debe actualizarse con más frecuencia, quizás cada año o año y medio. Podemos aprender mucho de la pandemia actual. Si nos preparamos bien ahora, podemos reaccionar más rápido, desarrollar vacunas más rápido y producir dosis suficientes más rápido".

Sobre la efectividad contra las variantes

Otro de los motivos por los que el experto se muestra especialmente optimista en por la certeza de que la vacuna de Pfizer "protege contra la mayoría de mutaciones conocidas, incluida la B.1.1.7", es decir, la variante británica, que hasta el momento es la que más extendida de encuentra a nivel mundial, y especialmente en Israel, país en el que se ha realizado el estudio.

Sin embargo, ante la posibilidad de que aparezcan variantes más contagiosas y mientras se desarrollan nuevas preparaciones y para evitar un colpaso del sistema sanitario "una estrategia simple podría ser administrar una tercera dosis de la vacuna actual. Una vacuna de refuerzo de este tipo podría producir una protección inmunológica tan fuerte que incluso las variantes ya no pasan".