Jorge Pla-García, investigador de la NASA especialista en Marte: "Mi trabajo es poner al ser humano allí"

Jorge Pla-García aprendió de niño cómo hacer que lo difícil pareciese fácil. Fue una lección de amor que le transmitió su padre y la recuerda cada día porque, según reconoce antes de empezar nuestra entrevista, le permitió ocupar hoy el lugar que ocupa en la Astronomía a nivel mundial. Es doctor en Astrofísica por la Universidad Complutense e investigador de cuatro misiones de NASA en Marte relacionados con la atmósfera de este planeta: instrumento REMS (misión Curiosity rover), instrumento TWINS (misión InSight) e instrumento MEDA y Consejo de Atmósferas de NASA (ambos de la misión Perseverance rover).

Practica natación, waterpolo, triatlón, ciclismo de montaña y carretera y atletismo. Sus publicaciones en su cuenta de Instagram confirman que ni siquiera en las etapas más duras de sus carreras en bici abandona su habitual sonrisa.

Observa el universo con pasión, pero sin perder esa humildad que le inspiró el divulgador estadounidense, defensor de la idea de que no somos más que un puntito dentro del punto azul pálido que es la Tierra en medio de la inmensidad del Universo.

En su intensísima agenda como investigador, padre, marido, divulgador, deportista y quién sabe cuántas cosas más, aún tiene un hueco para implicarse en tareas humanitarias como secretario de la ONG África Sawabona y colaborador en otras misiones.

Pero si de algo sabe un rato este madrileño, es de Marte. Digamos que su trabajo ayuda a allanar a el camino para que, cuando el hombre pise la superficie marciana, lo haga con absolutas garantías. Conoce cómo se producen las tormentas, los vientos, los cambios de temperatura o las estaciones. Y sí, nos despeja también muchas dudas en torno a las posibilidades de encontrar vida en el planeta marciano, la fecha del primer viaje humano o las expectativas de Elon Musk de construir en él ciudades.

¿Qué despertó tu interés por ver más allá de las estrellas?

Empezó con algo tan simple como un reproductor de VHS. Solo tenía que darle al play porque mi padre ya me dejaba lista la cinta de la serie documental 'Cosmos', de Carl Sagan. Y si quería leer, topaba de nuevo con Carl Sagan porque eran los libros que le dejaba a la vista. Era un apasionado de las estrellas y me metía el gusanillo del universo de una manera muy subliminal. Lo hizo realmente bien. Carl Sagan es el divulgador por excelencia y gracias a él tengo la suerte de dedicarme al universo, que es mi pasión.

¿Es fácil ser astronauta en España? 

Aunque siempre tuve claro que me dedicaría a explorar el universo, de joven era más indeciso. Estudié ingeniería informática y fue al terminar la carrera cuando empecé a seguir esa dirección. Hice doctorado en Astrofísica y realicé varios másteres en ciencias espaciales, astronomía y meteorología. He tenido que dar muchas curvas para poder estar hoy en las misiones de NASA en Marte. No me arrepiento porque el trabajo duro ha dado sus frutos. Ser astronauta es extraordinariamente difícil. El nivel de competitividad y exigencia es altísimo. En 2022 me quedé a las puertas de ser uno de los astronautas de la Agencia Espacial Europea. Pasé el primer filtro. De los 22.000 aspirantes, quedó el 6% y yo estuve entre ellos. Éramos 1.500 españoles y solo 67 pasamos ese primer corte. El segundo, con pruebas durísimas, no lo superé, pero es mi sueño y no renuncio.

¿Con qué sueñas cuando miras tan alto?

Mi sueño es estar vivo cuando el ser humano pise Marte. Y creo que lo vamos a ver en nuestro tiempo de vida. No como dice Elon Musk, con ciudades en Marte, sino con misiones tripuladas por humanos. Es decir, estar alguna semana en la superficie y volver. Otro gran sueño que tengo es ver el descubrimiento de vida extraterrestre. Sería el mayor descubrimiento de la historia de la humanidad. No lo digo en primera persona. No quiero ser la primera persona que pise Marte, tampoco quiero ser la primera persona que descubra vida extraterrestre. Quiero estar vivo cuando esto ocurra.

¿Te atreverías a poner fechas?

Estoy convencido de que veremos a un ser humano caminando por la superficie de Marte. Es el destino más fácil y económico de todo el Sistema Solar. Será un viaje que en la ida podría durar entre siete y nueve meses y otros tantos en la vuelta. Una vez allí, la estancia de exploración en la superficie sería de unos días o unas semanas. No será algo inmediato, pero nuestra generación lo va a ver.

¿Has tenido muchas renuncias en el plano personal?

No lo llamaría renuncias, sino dedicación y sacrificio. Es muy duro, pero apasionante. Por eso resulta tan enriquecedor. La sensación es de plenitud porque, a pesar de que la ciencia no está muy cuidada en España, puedo decir que soy un privilegiado. Es una pasada recibir datos de Marte casi en tiempo real desde la flota de robots que tenemos allí desplegados, tanto en órbita como en superficie.

¿Nos puedes avanzar qué llega desde allí?

Los robots nos están diciendo que Marte fue un planeta templado y benévolo en el pasado, con presencia de mares y océanos. Debido a que Marte perdió su campo magnético, es decir, su escudo de protección, el viento fue barriendo la atmósfera. Por eso, pierde toneladas de gases al espacio. Es la causa de la falta de vapor de agua, mares u océanos. Es interesante estudiar los procesos químicos del suelo, la composición de las rocas, las tormentas. Sabemos también que es un planeta muy frío, con temperaturas por debajo de los 60º C bajo cero y con grandes diferencias entre el día y la noche. Marte no deja de dar sorpresas. Al contrario de lo que se pensaba, es un planeta geológicamente activo.

¿Por qué la ciencia ha puesto los ojos en Marte?

Es el planeta más accesible. Es verdad que Venus está más cerca, pero meteorológicamente es infernal por su calentamiento global efecto invernadero desbocado. Marte es un auténtico laboratorio natural para entender mejor la Tierra. Es curioso que tres planetas tan similares en su origen -Venus, Tierra y Marte- hayan evolucionado de manera tan diferente Cuanto más se conocen otros cuerpos del Sistema Solar, como Venus y Marte, mejor entendemos los científicos la Tierra. Incluso en nuestra lucha contra el cambio climático se ve la necesidad de conocer bien cómo son y cómo han evolucionado las atmósferas de otros planetas.

¿Qué es lo que más te impresiona del universo?

Del universo en general, la luna helada del gigante Júpiter, Europa, y las de Saturno, especialmente Encelado y Titán. Son lugares ideales para buscar actividad biológica fuera de la Tierra. Titán es un paraíso para los geólogos. Esta luna fría cargada de metano es lo más parecido a la Tierra que existe en Sistema Solar. Es como una Tierra primitiva congelada.

¿La carrera espacial goza de buena salud?

Estamos viviendo una era dorada gracias a la irrupción de empresas privadas que la están revitalizando con diferentes intereses, lanzamiento de satélites y mejora de la tecnología. El espacio es ahora más accesible. Se ha democratizado. Además de la empresa privada, hay un nuevo actor: China. Esta potencia está consiguiendo en tiempo récord lo que Estados Unidos y Rusia tardó décadas. Han sido los primeros en llegar a la cara oculta de la Luna, los primeros en enviar una misión a Marte absolutamente china. Está tomando el liderazgo y tienen en mente enviar ciudadanos chinos a la Luna. Esto tiene una implicación estratégica muy importante porque quien domina el espacio domina estratégicamente nuestro planeta. Por eso, EEUU está acelerando estratégicamente los plazos, las misiones y las inversiones. Hay una guerra, que no es la guerra fría que mantuvieron EEUU y la Unión Soviética en la segunda mitad del siglo XX, pero sí es una contienda encubierta que favorece la exploración del espacio. Por otra parte, hay que decir que España es líder en meteorología en suelo marciano desde el Centro de Astrobiología, el único adscrito a la NASA que se encuentra fuera de territorio estadounidense.

¿Qué aporta Elon Musk a la carrera espacial?

Quiero aclarar que Space X no es Elon Musk, sino toda la empresa. Sus logros son abrumadores. Te puede gustar o no el personaje, que es muy controvertido, pero hay que reconocer que ha conseguido algo tan increíble como democratizar el espacio y reducir los costes de lanzamiento de una manera brutal.

¿Qué opinión te merecen los paseos espaciales de los millonarios?

No estamos hablando de astronautas, sino de turistas espaciales. Es verdad, que es una forma de fomentar los ingresos, pero estos viajes contaminan muchísimo y, en estos momentos, es prioritario cuidar nuestro planeta. Si se hacen, debería buscarse la eficiencia, tanto a nivel económico (para financiar los lanzamientos) como medioambiental, minimizando su impacto. En general, soy reacio a este tipo de viajes espaciales.