Todas las alarmas se han disparado. No queda stock de mascarillas, ni de geles limpiadores de manos. Los casos de coronavirus no dejan de aumentar en España y la preocupación alcanza niveles insospechados. Tanto es así, que lo que se ha disparado estos días es el número de personas que se plantean preparar un testamento por lo que pueda pasar.
"La demanda se ha multiplicado en los últimos días, hasta el punto que hemos tenido que reforzar nuestro equipo para poder dar respuesta a los casos en menos de 24 horas", asegura Jordi Mercader, el director de la plataforma testamento.es.
Por el momento, los que más se están demandando son los testamentos notariales, que son aquellos redactados por el experto ajustándose a todas las normas legales y guardando una copia del mismo. El testador decide el reparto de sus bienes, propiedades y dinero y, por otro lado, deja claro sus deseos respecto a sepultura, donación de órganos o tratamientos médicos aceptados.
Desde 2011, la demanda de testamentos ha aumentado casi en un 15%. Los expertos nos aseguran que hasta hace relativamente poco el hacer un testamento era algo reservado para gente de alto poder adquisitivo que deseaba monitorizar la transmisión del legado a sus herederos. Sin embargo, la demanda ha cambiado radicalmente.
Crisis sanitarias, como la que estamos viviendo con el coronavirus alertan a la población y pone la posibilidad de fallecimiento en primera línea. De ahí que cada vez sean más las demandas que llegan en estos días. "Son muchos los padres que desean proteger a sus hijos en caso de deceso", aseguran los expertos.
Debido a la rapidez de la expansión a nivel mundial del coronavirus "muchas personas se están planteando hacer el testamento por la vía urgente y acceden a webs que permiten agilizar un trámite que hasta hace muy poco exigía varias visitas al notario".