{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
En Uppers le hemos otorgado el poder a las canas y a las arrugas, pero también nos unimos a la causa de los que prefieren lo contrario: parecer más joven. Así que te vamos a explicar qué es el Micro-Puncture, un tratamiento que aporta firmeza a la piel del rostro y el cuello a aquellos que han empezado a envejecer de forma prematura.
La pregunta es cómo se logra combatir el envejecimiento facial con Micro-Puncture. La respuesta está en la técnica empleada, que persigue estimular la fabricación de colágeno para recuperar la firmeza. Es la falta de colágeno lo que pone en marcha el proceso natural de envejecimiento. Esta proteína, presente en la piel, además de en los huesos, los ligamentos, los tendones y los cartílagos, proporciona resistencia y elasticidad.
Entrando más en detalle, los fibroblastos son las células que residen en el tejido conectivo y se encargan de segregar las proteínas de colágeno. A partir de los 20 años, la cantidad de fibroblastos comienza a disminuir y a los 80 se reducen a la mitad.
El tratamiento con Micro-Puncture se apoya en la facultad de la epidermis de autorregenerarse cuando es estimulada. Además, se emplea un sérum concentrado, rico en aminoácidos, vitaminas y péptidos de última generación, que favorece la reacción inflamatoria auto inducida y mejora la permeabilidad selectiva de la epidermis hacia sustancias biológicamente activas.
Para ello se utiliza un aparato especial de radiofrecuencia con el que se lleva a cabo la microestimulación a base de microinyecciones con una corriente continua que hace que el calor se disipe en la dermis. Estas microinyecciones estimulan, de forma natural, la producción y la síntesis de colágeno, elastina y glicosaminoglicanos, entre los que se encuentra el ácido hialurónico.
De esta manera se fortalecen las fibras existentes, mejora la laxitud y la microcirculación y se oxigena la epidermis, al igual que disminuye la flacidez. Al estimularse la fabricación de colágeno disminuye la relajación cutánea causada por el envejecimiento.
La consecuencia es que las arrugas se hacen menos visibles debido a que la piel se tonifica y recupera su firmeza, su elasticidad y su resistencia. Es lógico que todo esto se refleje en la piel del rostro y del cuello porque al final se alisa y se unifica su tono y se ilumina. Del mismo modo que la textura se vuelve más suave, jugosa e hidratada.
El Micro-Puncture es un tratamiento que consiste en punciones ínfimas, con lo que prácticamente es indoloro. Recomiendan que se repitan la sesión cada 15 días y se afirma que los resultados definitivos son naturales, ni artificiales o forzados.
Las sesiones tienen una duración de una hora y quince minutos aproximadamente y se emplean unos productos de cosmética adecuados y especiales para cada fase. En primer lugar, se prepara la piel con un masaje profundo del cutis, cuello y escote con unos cosméticos específicos. En segundo lugar, se lleva a cabo el Micro-Puncture para volver a aplicar el mismo cosmético y sellar la zona que se está tratando. En tercer lugar, se coloca una mascarilla determinada durante 15 minutos y, por último, se finaliza el tratamiento con unas cremas y fluidos concretos.