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El Gobierno y las asociaciones de autónomos y sindicatos han llegado a un acuerdo para el nuevo sistema de cotización de los trabajadores por cuenta propia. Bajan las cuotas para los que ganan menos de 1.300 euros, y suben para los que ganan más de 1.700 euros al mes. Pero también bajan las bases de cotización para los que reduzcan su cuota mensual, con lo que verán reducida su futura pensión o su prestación por cese de actividad. Así será el nuevo sistema.
El sistema acordado comprende 15 tramos de ingresos netos, esto es, la diferencia entre los ingresos y los gastos deducibles, como sueldos, arrendamientos o reparaciones. Se aplicará en tres años, de 2023, 2024 y 2025, en que la cuantía de las cuotas variará en función de los ingresos. El trabajador podrá cambiar la base de cotización en función de los beneficios esperados hasta seis veces al año.
Los más beneficiados con la nueva propuesta son los que tengan rendimientos inferiores a 670 euros al mes. Ahora pagan 294 euros de cuota, en 2023 pagarán 230 euros, en 2024, 225 euros; y en 2025 pagarán 200 euros de cuota. En 2025 pagarán 1.127 euros al año menos que ahora.
También salen ganando los que no superen los 900 euros, que se ahorrarán 647 al año; y los que no ganen más de 1.166 euros, que dejarán de pagar 407 euros de manera anual.
Los que declaren ingresos reales mensuales entre los 1.300 y los 1.700 seguirán pagando los 294 euros mínimos que se exigen hoy, por lo que no ahorrarán ni pagarán de más con el nuevo sistema.
Tendrán que pagar más aquellos cuyo rendimiento neto supere los 1.700 euros. La cuota será de 310 euros (16 más que ahora) para los que ganen entre esa cantidad y 1.850 euros al mes; o de 315 (21 más) para los que estén entre 1.850 y 2.030. Así, la cuota irá subiendo de cinco en cinco o de diez en diez por tramos. Los que ingresen entre 3.190 y 3.620, pagarán 370 euros al mes (76 euros más).
En el tramo más alto, los que ganen entre 4.050 euros y 6.000 tendrán que pagar 126 euros más al mes -una cuota de 420 euros- en 2023 y los que superen los 6.000 euros, 122, con una cuota de 500 euros que llegará hasta los 590 euros en 2025.
El nuevo sistema trae rebajas en las cuotas de los que ganen menos, pero también se rebaja su base de cotización. Ahora, la cuota mínima de autónomos está en 294 euros, ganes lo que ganes, y la base de cotización está en los 960,78 euros, con lo que cualquier autónomo que tenga derecho al 100% de su base reguladora, siempre que haya cotizado siempre por la mínima, cobraría al menos esos 960,78 euros al mes por 14 pagas.
Con el nuevo sistema también bajan las bases reguladoras, y más de lo que se ahorran por cuotas. Por ejemplo, para los que ganan menos de 670 euros, la base se queda en 2023 en 751,63 euros, 200 euros menos que con el actual sistema, cuando el ahorro de cuota es de 64 euros al mes. Y para 2025, la base de cotización para esta franja de ingresos baja a los 653,60 euros al mes, casi 300 euros menos que la base actual, cuando el ahorro de cuota es de 94 euros al mes.
De este modo, los autónomos que ganen menos verán disminuidas sus futuras pensiones, o sus prestaciones por cese de actividad, si no eligen tramos de cotización más altos.
Los representantes de los autónomos se han felicitado por el acuerdo. Tanto Upta, vinculada a UGT, como Uatae, vinculada a CCOO, dan por bueno el nuevo sistema de cotizaciones, mientras que ATA, vinculada a la CEOE, también da por buena la tabla de cotizaciones, aunque avisa de que "quedan algunos flecos por atar".