Estar con los abuelos, lo primero: la encuesta de qué es lo que hace más feliz a los niños de entre 3 y 8 años

  • Los niños tienen claro qué es lo que les hace felices ahora mismo: poder ver a sus abuelos

  • La pandemia ha reforzado el sentimiento de familia en los más pequeños, que valoran más pasar tiempo con ellos

  • Si la pandemia desapareciese, la mayoría de los niños irían a besar y abrazar a sus abuelos como primera opción

El último año ha sido complicado para todos al tenernos que adaptar a esta nueva normalidad, pero sin duda uno de los comportamientos más ejemplares en el año pandémico es el de los niños, que han puesto todo de su parte para combatir a la covid-19. Para conocer un poco cómo los más pequeños de la casa han cambiado en estos meses, la startup Lingokids ha realizado una encuesta a 600 familias españolas para ver qué es lo que le hace feliz a los niños españoles de entre 3 y 8 años, y sus abuelos tienen mucho que ver en su sonrisa.

La felicidad, ver a sus abuelos

Casi la totalidad de los padres ve a sus hijos felices, aunque uno de cada cinco reconoce que hay ocasiones en los que notan a los pequeños algo más serios a lo que acostumbran. Aún así, la empresa ha establecido hasta 23 alternativas a los niños para saber qué es lo que en estos momentos les hace más felices, y más allá de regalos sorpresa o poder pasar momentos divertidos con sus mejores amigos, destaca que el 39% elija ir a ver a sus abuelos como el plan que más feliz le hace ahora mismo.

Muchos nietos no han podido ver como les gustaría a sus abuelos, aunque el proceso de vacunación ya permite la vuelta de muchos abrazos que llevaban un año sin darse, eso sí, siguiendo todavía las medidas de precaución. Y parece que la pandemia ha hecho que los más pequeños valoren su núcleo familiar, porque al 38% le encantaría pasar una tarde de juegos de mesa en familia, mientras que el 22% desea volver a viajar todos juntos, pero otro de los datos más conmovedores es que a uno de cada cinco les hace feliz un abrazo de sus padres.

Esto es lo que más felices les hace, pero también echan de menos muchas cosas que llevan un año sin poder hacer, como ir a lugares divertidos con sus amigos o jugar con normalidad en el patio del colegio, aunque el 35% tiene claro que es lo que más echan en falta: pasar tiempo con sus abuelos, pues muchos de ellos tienen un vínculo muy fuerte con sus abuelos y desean volver a verlos con total normalidad.

Ganas de besar a los abuelos

Pero, ¿y si mañana nos despertásemos sin pandemia? El coronavirus sería historia, las mascarillas no serían necesarias y no tendríamos que ir a todos lados guardando la distancia de seguridad y echándonos gel hidroalcohólico cada dos por tres. Un sueño ideal cada vez más cerca pero del que no tenemos una fecha. Eso sí, los más pequeños tienen claro que harían en esa situación, pues uno de cada tres lo primero que haría es salir corriendo a achuchar y besar a sus abuelos, mientras que a uno de cada cinco le gustaría volver a reunir a toda su familia para estar todos juntos de nuevo.

A pesar de que en los últimos tiempos verse las caras no ha sido siempre fácil, muchos padres han intentado que abuelos y nietos no perdiesen el contacto. Por eso mismo, el 42% de los encuestados ha ido a ver a los abuelos con cierta periodicidad, aunque reconocen que siempre han intentado mantener las distancias y usar la mascarilla para no ponerlos en peligro. Mientras tanto, un 29% ha preferido quedar con ellos en exteriores, o bien en terrazas o bien para dar un paseo. Sin embargo, también un 29% ha decidido no ver a los abuelos y sustituir las visitas por llamadas y videollamadas continuas, por lo que la tecnología ha sido esencial para ellos.

Los niños han sido la alegría para muchos en pandemia, pero hay que recordar que a ellos también les ha afectado tanto el encierro como las continuas restricciones, en especial a su estado de ánimo, sintiéndose más nerviosos, cansados o con menos energía dependiendo del momento.