Aprender artes marciales con Topuria: su gimnasio cuesta menos que el tuyo

Desde que se hizo con el título mundial de peso pluma de la UFC en Los Ángeles el pasado 18 de febrero, el luchador hispano-georgiano Ilia Topuria es el hombre de moda en España. Su victoria frente al australiano Alexander Volkanovski ha puesto el foco en las artes marciales mixtas (MMA, por sus siglas en inglés), una modalidad deportiva que engloba diferentes técnicas de combate. Puede que incluso tú mismo tengas interés en practicarla. Para ello puedes acudir a un gimnasio a aprender la técnica y adquirir la forma física de un luchador, sin necesidad de que tengas que salir al tatami a partirte la cara con nadie. Una opción muy al alcance de la mano es el 'Climent Club', en Alicante, el mismo en el que 'El Matador' se ha forjado como campeón.

El gimnasio donde Topuria comenzó a practicar las MMA a los 15 años es propiedad de dos nietos de emigrantes alicantinos a Argentina que han regresaron a sus raíces en 2002, con la crisis del 'corralito': Jorge y Agustín Climent, entrenadores personales del campeón. Ambos viven un momento de gloria al frente de un establecimiento que no para de recibir llamadas y visitas de interesados para convertirse en luchadores profesionales, según atestigua la agencia EFE.

Los bonaerenses Jorge (48 años) y Agustín (43) están casi al límite de la capacidad con 300 alumnos que, sobre todo por las tardes, copan los 800 metros cuadrados de tatamis practicando tanto las MMA como el boxeo, Jiu Jitsu, Grappling y Muay Thai, informa Sport. La alta afluencia en el gimnasio se debe al éxito de Topuria, claro está, pero también a sus precios populares.

Los hermanos Climent no olvidan sus duros y modestos orígenes, por eso sus precios oscilan entre los 60 euros para adultos y niños a partir de 5 años que practiquen una disciplina, los 90 si son dos, 110 tres, 130 cuatro y hasta 150 euros para los más ambiciosos que se lancen a las cinco modalidades de artes marciales en sesiones de una hora y media de lunes a viernes.

El emplazamiento del gimnasio, una antigua carpintería reconvertida en el número 8 de la calle Burgos del barrio del Garbinet, es muy del gusto de los Climent, pero en vista de la alta demanda ya sopesan buscar unas instalaciones más amplias y modernas en la misma ciudad de Alicante. El gimnasio actual es un recinto de dos plantas dominado por la 'jaula' octogonal, algo más pequeña que las oficiales y presidida por una placa con las palabras 'Peligro de muerte'.  'Esto no es Disneylandia' se puede leer en una de las paredes de la planta baja junto a dos primeros planos de Topuria, aviso a los aspirantes de que van a ser tratados con el mismo rigor y disciplina con los que fue tratado 'El Matador'.